Prueban un algoritmo en personas con pérdida de audición, que podría incorporarse a los audífonos.
Estados Unidos
Las personas con pérdida auditiva experimentan dificultades para comprender el habla en situaciones con ruido ambiental. El fenómeno se conoce comúnmente como "efecto cóctel”. El profesor Eric Healy, del Laboratorio de Habla y Psicoacústica de Ohio, en Estados Unidos, lo investiga: "Concentrarse en lo que el hablante dice e ignorar el resto de sonidos es algo que un oyente con audición normal hace sin problemas, mientras que para una persona con discapacidad auditiva resulta difícil, no obstante, hemos descubierto una manera de allanarles el terreno”. La solución reside en un algoritmo informático que analiza de forma inmediata el habla y elimina la mayor parte del ruido de fondo.
Eliminar el ruido de fondo
En los experimentos se trabajó con doce voluntarios. Los participantes tenían que quitarse sus audífonos y escuchar unas grabaciones de sonido cubiertas por ruido de fondo a través de auriculares, y repetir las palabras que oían. Después, se repetía el mismo procedimiento, pero tras haber procesado antes las grabaciones con el algoritmo informático para eliminar el ruido ambiental.
El algoritmo era particularmente efectivo contra los murmullos ambientales, llegando a mejorar la comprensión del habla un 25% a 85% de media. En cuanto a los ruidos estacionarios, mejoraba la compresión de un 35% a un 85% de media.
Mejor audición
Los investigadores repitieron este experimento con doce estudiantes universitarios sin discapacidad auditiva y descubrieron que los resultados de los alumnos sin el uso del algoritmo eran peores que los de los discapacitados auditivos con el proceso algorítmico. Es decir, sorprendentemente las personas con discapacidad auditiva que lo usaron pasaron a oír mejor que los estudiantes sin ningún tipo de pérdida auditiva, apunta Healy.
Aunque estos experimentos preliminares se basan en sonidos pregrabados. Próximamente, los investigadores pretenden perfeccionar el algoritmo para que sea posible procesar mejor los sonidos del habla en tiempo real. Y así poder adaptar esta tecnología en un futuro a una nueva generación de audífonos digitales. |